La UGEL Islay (Arequipa) intentó ayer reanudar las labores escolares de los distritos de Mollendo e Islay, pero los manifestantes contra el proyecto minero Tía María evitaron que ello sea posible.
Ante esta situación, la Gerencia Regional de Educación manifestó que las clases seguirán suspendidas, situación que ocurre desde mediados de julio de este año.
“Se había evaluado con la Policía, Defensoría y Fiscalía el reinicio de clases en el valle de Tambo, pero la gente apenas se enteró que se iba a retomar en Mollendo e Islay, llegaron cerca de los colegios y hubo enfrentamientos entre policías y manifestantes. Eso irrumpió la tranquilidad y seguridad de los escolares”, explicó a Perú21 el gerente de Educación, Milton Casaperalta.
Algunos padres de familia también solicitaron a la UGEL que se postergara el regreso a clases.
La suspensión de labores escolares se registra desde el pasado 15 de julio. Casaperalta indicó que, desde entonces, se adelantaron 10 días las vacaciones de medio año. Por tanto, los escolares han perdido 20 días de clases, descontando los fines de semana.
El perjuicio se siente en 75 colegios de los distritos de Cocachacra, Deán Valdivia, Punta de Bombón y Mejía. En Islay hay 12,500 estudiantes de los niveles de inicial, primaria y secundaria perjudicados.
“De ser necesario, se recuperarán las clases en enero”, puntualizó Casaperalta.
Tras los reiterados enfrentamientos en Islay, los regidores de esa provincia demandaron mayor resguardo policial. También pidieron que se sancione a algunos medios de la zona que incitan a la violencia.
En Arequipa, el paro que se retomó el jueves sigue siendo pacífico; todas las actividades se desarrollan con normalidad.