La jefa de la Sunat, Tania Quispe, negó hoy que haya sido víctima de reglaje por parte de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) e indicó que el seguimiento que se le hizo fue a pedido de ella a propósito de un tema personal.
Según dijo Quispe a RPP, ella le pidió al ministro del Interior, Daniel Urresti, que hicieran seguimiento a su hijastro luego de que sospechara de personas cercanas a este, quienes se mostraron muy interesados en conocer sobre las actividades de la superintendenta en la Sunat.
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"Tengo un hijastro que vino a vivir a Perú hace muy poco y comenzó a relacionarse con gente que me causó preocupación por el tipo de información que pedían, por las preguntas qué hacían", dijo Quispe.
Ella resaltó además que desde el año pasado, la Sunat ha asumido funciones de alto riesgo relacionados a la minería ilegal y al control de insumos químicos destinados al narcotráfico.
"Él (Urresti) me pidió autorización para hacer seguimiento a entorno de mi familia y se lo di", agregó Tania Quispe tras indicar que esta operación duró dos días.
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Por su parte, el ministro Daniel Urresti indicó que el seguimiento se realizó debido al alto cargo de Tania Quispe dentro de la Sunat. "Es un funcionario y tenemos que velar por su seguridad", refirió.
Las sospechas de que la superintendenta haya sido una nueva víctima del supuesto reglaje que —según denuncian— se manejaría a pedido del gobierno, surgió luego de que la periodista Cecilia Valenzuela publicara una columna en el diario El Comercio donde indicaba que la DINI tenía un expediente contra Tania Quispe.