Luego de que el gobernador regional de Ica, Fernando Cillóniz, revelara a este diario que varios parlamentarios de Fuerza Popular (FP) lo llamaron para pedirle favores, el secretario general de Transparencia, Gerardo Távara, manifestó que dichos legisladores deberían pasar por la Comisión de Ética del Congreso.
Según las declaraciones del funcionario regional, los parlamentarios César Segura, Betty Ananculi y Miguel Elías habrían exigido cosas como apoyo para su familia, trabajo para militantes de FP y la destitución de funcionarios.
Távara expresó que la Comisión de Ética “puede iniciar una indagación de oficio tomando las declaraciones de Cillóniz como un indicio”.
Tráfico de influencias
“Estos casos podrían configurar uno de tráfico de influencias. Podría ser un hecho delictivo y no solo una falta al Código de Ética”, dijo a Perú21.
Indicó que no es una función de los congresistas “pedir favores”. En esa línea, solicitó a otros gobernadores que se sumen a denunciar a parlamentarios que los presionan.
Por su parte, el secretario de la comisión, Eloy Narváez (APP), comentó que sí se puede aceptar de oficio esta denuncia para conocer lo sucedido.
“El que informa este tema tan delicado es un funcionario, así que amerita su revisión”, expresó.
Para el legislador, ningún parlamentario debería utilizar su cargo para presionar a otras autoridades, “porque no es nuestra función, además de que es algo ilegal”.
A su turno, la vocera alterna de Fuerza Popular, Milagros Salazar, sostuvo que si hay congresistas que “están pidiendo puestos de trabajo, deben ser denunciados”. No obstante, cuestionó que Cillóniz no haya iniciado un proceso formal contra los legisladores de su bancada y “que los descalifique sin mostrar evidencias”.