Frente al descubrimiento de que tres suboficiales de la Marina de Guerra del Perú habrían vendido información clasificada a Chile, el gobierno peruano entregó una nota diplomática a su par chileno para expresar "su más enérgica protesta y rechazo por las acciones de espionaje en contra de la seguridad nacional" y llamó a consulta a su embajador en Santiago.
"En la fecha, el director general de América convocó al encargado de negocios de la República de Chile, y le hizo entrega de una nota diplomática", señala el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
En el documento, Perú le pide a Chile que investigue el caso y que sancione a los responsables del presunto espionaje.
"En la comunicación entregada por el director general de América se manifiesta, asimismo, la necesidad de que el gobierno de Chile lleve a cabo una rápida y profunda investigación, a fin de procesar a los responsables de estos actos y se informe al Gobierno del Perú del resultado de la misma, así como se le brinde las seguridades de que dichas acciones de espionaje no se habrán de repetir", se indica en el pronunciamiento de la Cancillería.