La mañana de ayer, la Presidencia del Consejo de Ministros inauguró una mesa técnica en el Vraem en busca de conversar y plantear soluciones para los diferentes conflictos económicos, sociales y agrarios que hay en la zona. Pero solo tomaron la palabra los alcaldes de esa zona de la selva central. Esta situación molestó a los apus de las comunidades indígenas que también fueron invitados a la reunión, pero no les permitieron hablar.
Muy respetuosos, los apus continuaron en la sesión. Sin embargo, la gota que derramó el vaso fue la vestimenta que le colocaron al aún premier Aníbal Torres.
MIRA: PCM plantó a autoridades y pobladores del Vraem
La alcaldesa del distrito de Río Negro, Mónica Chuquimia, entregó la indumentaria tradicional de las comunidades indígenas de la zona al premier Aníbal Torres, quien encabezaba el evento.
Ante este acto, los dirigentes indígenas –perturbados por la situación– se levantaron de sus asientos y se retiraron del lugar. A su salida, declararon a la prensa local: “Los alcaldes no son dueños, no son pueblos indígenas. Por lo tanto, nosotros sentimos una falta de respeto que ellos puedan poner atuendo del pueblo indígena cuando no les corresponde”, aseveraron.
Horas más tarde, enviaron un oficio al premier Torres en que reiteraron lo antes mencionado. Señalaron que la alcaldesa Chuquimia no los representa como comunidad indígena y que han acordado que a partir de lo sucedido “queda prohibido el uso del atuendo indígena como acto de reconocimiento sin autorización de los pueblos Ashaninkas y Nomatsigengas (...) no es un instrumento folcklórico ni debe servir para las fotos”, manifestaron.
El documento fue recibido por el primer ministro, quien se disculpó públicamente con las organizaciones indígenas cuando terminó el evento. Torres se dirigió, junto a otros miembros del gabinete, al local de la comunidad afectada e ingresó para tener una conversación a puerta cerrada.
Pese a que la prensa local intentó obtener declaraciones, Aníbal Torres no dijo nada. Los militares que resguardaban el lugar cerraron las puertas y no dejaron ingresar a los medios de comunicación.
En medio del debate, Jesús Vargas, expresidente del Frente de Defensa de Satipo, denunció públicamente y reclamó al premier la asistencia del alcalde provincial de Satipo, Iván Olivera.
“Está sentado (Torres) al lado de un corrupto (Olivera), se habla del tema de la corrupción y la corrupción está ahí”, denunció señalando con el dedo al burgomaestre vinculado a la organización criminal Los Pulpos de Satipo.