La tarde de ayer, las beatas del convento de Nuestra Señora de Copacabana hicieron un alto en sus obras de labor social para –con documentos en mano– revelar que

Según la municipalidad, la cofradía de Nuestra Señora de Copacabana tiene una deuda por arbitrios de S/220 mil que se venció el pasado 29 de agosto. Las beatas están preocupadas porque no saben cómo apareció tan extraña deuda y mucho menos cuentan con el dinero para pagarle a la municipalidad de Enrique Peramás. 

Municipio dice que deben arbitrios.
Municipio dice que deben arbitrios.

y hasta la cuenta bancaria que usan para pagar el sueldo de los profesores del colegio y comprar sus alimentos.  

“Estamos abocadas a rescatar el convento. Nos amenazan con la medida coactiva. Este convento se hace pedazos. Ellos no se van a agarrar la parte del convento que se viene abajo, ellos quieren agarrarse el colegio”, sostienen asustadas las religiosas que se establecieron en el Rímac desde el siglo XVII.  

Este es el estado de algunos sectores del convento del Rímac
Este es el estado de algunos sectores del convento del Rímac

Las beatas de la cofradía fundaron un colegio en el que desarrollan una tarea educativa y cobran una tarifa social, como otras obras similares. 

Según una resolución de setiembre de 2016 del Tribunal Fiscal del Ministerio de Economía, las actividades de educación católica ofrecidas por las beatas están exoneradas del pago de arbitrios municipales. Así lo establece también el concordato entre el Vaticano y el Estado peruano. 

Sin embargo, la Municipalidad del Rímac desconoce las resoluciones y acuerdos del Estado e insiste en cobrar los arbitrios al convento. Sostienen que con los ingresos del colegio y el alquiler de otros inmuebles, tienen suficiente dinero para pagar una deuda que no debería existir. 

“Nosotras no tenemos dinero para pagarles. La congregación, si tuviera dinero, hubiera pagado. Tenemos que cubrir la planilla del colegio, tenemos beatas que están enfermas y necesitan médicos. ¿De dónde vamos a sacar dinero?”, sostiene la hermana Hermilia. 

La Beneficencia Pública de Lima, encargada de administrar los bienes de las cofradías, y que debería entregarles una parte de las ganancias por los alquileres, también les ha dado la espalda. 

EN PELIGRO
Ante el embargo, la municipalidad pondría en riesgo el proyecto de modernización de aulas que la cofradía planea para el 2019. Además, estarían en riesgo las misiones que las beatas hacen en el Vraem. 

El colegio del Rímac ofrece educación inicial, primaria y secundaria.
El colegio del Rímac ofrece educación inicial, primaria y secundaria.

Perú21 transmitió esta preocupación a la gerencia de comunicación de la Municipalidad del Rímac, pero, después del saludo, no hubo respuesta.  

DEBE SABER
La Municipalidad del Rímac promociona dentro del circuito turístico la iglesia del convento de Copacabana, pero a su vez busca embargar los bienes.

Más cofradías advirtieron que hay una mala administración de sus bienes, que están en manos de la Beneficencia de Lima.

Según denunciaron, la Beneficencia no ha cumplido con pagar los arbitrios de los inmuebles y ahora se los cobran a las cofradías.