Mauricio Mulder explicó por qué no se puede cerrar el Congreso. (Andina)
Mauricio Mulder explicó por qué no se puede cerrar el Congreso. (Andina)

Tras la reunión que sostuvo , presidente del Consejo de Ministros, con el ex mandatario Alan García, el parlamentario aseguró que durante el diálogo – en el cual también estuvo presente – "se han limado asperezas".

"No se trata simplemente de un acto sino de un proceso. Aquí ha comenzado un proceso de construcción de confianza que culminará, obviamente, el día de la presentación (del gabinete Cateriano ante el Congreso de la República para pedir el voto de confianza)", señaló el congresista aprista.

Mulder descartó que en la reunión se haya acordado que la bancada de Concertación Parlamentaria se sume al voto de confianza para el gabinete Cateriano, que tiene hasta el 2 de mayo para presentarse ante el Pleno.

"Se están superando (las diferencias), y se está generando confianza. Saludamos que él (Cateriano) tenga esta predisposición al diálogo. Nosotros vamos a acompañar esta política de diálogo. Votaremos la confianza el día que corresponda, ese día vamos a decidir (si le damos el voto o no)", dijo.

El legislador también refirió que, de llegar el gabinete Cateriano a pedir el voto de investidura, espera que se siga dando el diálogo con los distintas fuerzas políticas del país. Según reveló, el premier le anunció que adicionará puntos específicos a las medidas que tomará durante su gestión, así como un esquema de diálogo a futuro, después del voto de confianza.

Mauricio Mulder señaló que durante la reunión no se ha hecho ninguna referencia sobre el lenguaje que usa el presidente Ollanta Humala. Esto, luego de que, el último lunes, el mandatario calificara de "jauría de cobardes" a los parlamentarios opositores que critican la labor de la primera dama, Nadine Heredia.

La rivalidad entre Pedro Cateriano y Mauricio Mulder es conocida desde hace varios años atrás. Entre los motivos está la investigación que realizó el hoy premier a Alan García tras su primer gobierno, que incluso llegó a plasmarlo en el libro El caso García, por su desbalance patrimonial.

Además, en los últimos meses, ambos se han lanzado calificativos e insultos a través de sus respectivas cuentas de Twitter. Pese a todo ello, se dieron la mano tras concluir la reunión, que se llevó a cabo en la oficina de Alan García, en Miraflores.