Petroperú ha planificado la modernización del Oleoducto Norperuano (ONP) para aumentar la capacidad del traslado de barriles y disminuir el impacto de posibles derrames de petróleo.
Este año pretenden terminar el diseño del proyecto y calcular los costos. Para 2022 esperan que la tubería ya esté totalmente mejorada.
Según explicó el subgerente de operaciones del ONP, Héctor Inga, el ducto fue diseñado hace 41 años para transportar crudos ligeros con una viscosidad de a penas 12 centistokes.
No obstante, actualmente, la estación de Andoas produce un crudo espeso de 700 centistokes. Es decir, antes se podía bombear 100,000 barriles al día, pero ahora, debido a la mayor viscosidad, se puede bombear solo 25,000.
En el marco del plan, según informó Inga, la alta administración de Petropéru autorizó que se ejecuten prioritariamente ciertas mejoras de la tubería.
“Por ejemplo, la instalación de 21 válvulas de bloqueo automático o presión remota. Si hay un corte en la tubería, esta válvula va a tener un sistema de detección que automáticamente se va a cerrar y permitirá que el derrame de petróleo sea el mínimo”, precisó el funcionario.
Según el especialista, al norte de Loreto, en Andoas, existen reservas potenciales de más de 443 millones de barriles. Por ello es que se justifica una inversión para modernizar todo el Oleoducto Norperuano.