El presidente de la Comisión de Constitución y Reglamento del Congreso de la República, Miguel Torres (Fuerza Popular), anunció que este jueves a las 10 a.m. su grupo de trabajo recibirá al premier Fernando Zavala, junto a otros ministros, para que den alcances generales de los 112 decretos legislativos emitidos por el Ejecutivo durante el plazo de las facultades delegadas por el Parlamento.
"Luego que se presente el premier y responda las inquietudes de los congresistas, el grupo de trabajo liderado por Úrsula Letona va a hacer informes de cada uno de los decretos legislativos para que la comisión los debata y apruebe los dictámenes correspondientes", manifestó Torres a periodistas en el Congreso.
Para Miguel Torres, lo que pasará con la mayoría de los decretos legislativos es que se hayan dictado dentro de los límites de las facultades otorgadas por el Congreso y estén conforme a la Constitución. "En ese caso, simplemente se confirma y queda ahí el tema".
No obstante, Torres sostuvo que si, por el contrario, algunos decretos legislativos "han ido más allá de las facultades entregadas o transgreden la Constitución", lo que hará la comisión de Constitución "es aprobar un dictamen declarando su derogación parcial o total".
El parlamentario precisó que no se trata si los decretos legislativos le gustan o no, sino que cumplan con las condiciones establecidas. En ese contexto, expuso dos situaciones:
"Por ejemplo, si no nos gusta algún decreto en específico, pero el mismo ha sido emitido dentro de las facultades, entonces debemos esperar que algún congresista presente algún proyecto de ley y que se analice en las comisiones para su votación en el Pleno".
"Si encontramos un decreto que ha ido más allá de las facultades que le habíamos otorgado, pero que tiene un buen contenido, o sea, una buena intención, lo que correspondería es que se derogue el decreto e inmediatamente se presente un proyecto de ley con el mismo contenido, para que el Congreso lo apruebe".
Finalmente, Torres sostuvo que el Congreso está cumpliendo con su labor al revisar los decretos legislativos y que no hay "ningún interés obstruccionista".
"No nos pueden pedir que dejemos de hacer este control, que es bueno y sano para nuestra democracia. Este Congreso ni le tiene miedo al trabajo", enfatizó.