El decano del Colegio de Periodistas, Max Obregón, advirtió ayer el peligro que se cierne sobre las libertades de prensa y de expresión si es que el Congreso de la República aumenta las penas para el delito de difamación.
Según el proyecto de nuevo Código Penal, que se alistaba a debatir en el Parlamento, la difamación tendría una pena de cárcel efectiva de entre 3 a 5 años y ya no suspendida, como sucede en la actualidad. Incluso, la corriente entre los expertos y organismos defensores de las libertades es que la difamación ya no se considere un delito.
«Si esto llegara a pasar, estaríamos simplemente en el cierre del ejercicio de la libertad de expresión. Cada uno estaría con una espada permanente durante su trabajo», sentenció Obregón.
Indicó que ni siquiera se podrían difundir las declaraciones de un personaje porque podrían ser acusados de difamación. Agregó que el caso debe pasar al ámbito civil.
