Marisa Glave: "No creí en las acusaciones y asumo mi responsabilidad"

Quiere llegar a la verdad y asegura que tiene las manos limpias. La congresista Marisa Glave, quien fue regidora durante la gestión de Susana Villarán, reconoció la responsabilidad política que le toca por haber participado en la campaña del "No" a la revocatoria contra la ex alcaldesa de Lima, en la cual se habrían producido pagos de Odebrecht y OAS a favor de los publicistas que estuvieron detrás de esta campaña

"Tengo una mezcla de emociones encontradas tras leer las declaraciones de Garreta sobre el financiamiento a la campaña del NO a la Revocatoria. Siento indignación, asombro, decepción y a la vez necesidad de que se sepa la verdad y que actúe la justicia", escribió en Facebook. 

La legisladora señaló que "alguien recibió dinero durante la campaña del NO. Confirmar eso es algo que nos golpea y nos duele a quienes participamos activamente pidiendo el voto por el NO, porque lo hicimos con la convicción de que apoyábamos una campaña ciudadana que hacía frente a una mafia que nunca dio la cara y que se oponía a reformas centrales en la ciudad para beneficiar a intereses económicos corruptos. Quienes nos sumamos a la campaña dimos todo lo que estaba a nuestro alcance, tiempo, ilusión, imagen y prestigio, de manera honrada".   

"No sabíamos nada de esto" 

Glave dijo que como regidora y parte del equipo municipal que fue dirigido por Susana Villarán, "me toca enfrentar ésta realidad. Creí que era imposible que hubiera corrupción en una gestión que precisamente enfrentaba la corrupción. No creí en las acusaciones. Por esto, asumo la responsabilidad política que me toca. Esto me deja muchas lecciones, la primera, que la corrupción está en todas partes y que debemos estar alerta siempre, sin importar el tinte político. Toca ahora averiguar quiénes fueron, porque ellos y ellas deben dar la cara y responder por esto". 

La legisladora pidió a todo aquel que tuvo conocimiento del dinero que vino de Odebrecht y OAS que diga  toda la verdad:  "Nos lo deben a quienes nos dejamos la piel y el corazón en esa campaña y no sabíamos nada de esto. Nos lo deben a los peruanos que buscamos que la política deje de ser el lodazal donde la corrupción marca a todos por igual". Y acotó: "No tengo las manos manchadas con dinero corrupto. He enfrentado siempre a la corrupción, a diferencia de otros actores políticos que en medio de este escándalo buscan zafar el cuerpo y blindar a los implicados, en cambio, yo insisto que se diga la verdad y que la justicia actúe. Estamos dentro de un sistema político corrupto que tenemos y debemos cambiar. No voy a callarme y seguiré hasta el final trabajando en cumplir las promesas que hice a la ciudadanía en las elecciones".