Marianella Ledesma se convirtió en la primera mujer presidenta del Tribunal Constitucional

La ceremonia de juramentación inició con el canto del Himno Nacional en quechua. Luego, con algunas palabras del expresidente del Tribunal Constitucional (TC), Ernesto Blume, quien destacó que este siglo le pertenece a las mujeres y resaltó las virtudes de su sucesora Marianella Ledesma a cargo de la institución más importante de justicia.

NOTA ORIGINAL

La magistrada Marianella Ledesma Narváez jurará este viernes como presidenta del Tribunal Constitucional (TC) y, de esa manera, se convertirá en la primera mujer en ocupar ese cargo en el máximo órgano de interpretación de la Carta Magna. Ledesma asumirá el puesto durante la inauguración del año jurisdiccional constitucional, ceremonia que se inició a las 11 a. m.

La miembro del TC fue elegida en una votación que se realizó el 2 de diciembre del año pasado. Sus colegas Ernesto Blume, José Luis Sardón y Augusto Ferrero le dieron su respaldo, y sumando el voto de ella misma consiguió la mayoría. Mientras tanto, Eloy Espinosa-Saldaña, Manuel Miranda y Carlos Ramos se opusieron.

En diálogo con Perú21, Ferrero Costa –quien será el nuevo vicepresidente de la entidad– reveló aquella vez que fue él quien propuso a Ledesma Narváez como titular del órgano constitucional.

“Había que rendirle homenaje a una mujer con esa trayectoria, había que darle importancia como se hace en otras partes (...) la doctora Ledesma es un lujo en el campo del derecho peruano e internacional”, declaró.

Bajo el mandato de Ledesma, el TC deberá resolver la demanda competencial planteada por el presidente de la Comisión Permanente, la cual cuestionó la disolución del Congreso dispuesta por el presidente Vizcarra el 30 de setiembre. Una cautelar que pedía la suspensión de la disolución fue declarada improcedente por el mismo TC.

Datos:

- Marianella Ledesma cuenta con un doctorado en Derecho y Ciencia Política por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

- No obstante, debido a que ya cumplió con los cinco años de mandato para el que fue elegida por el Congreso, no culminaría los dos años como presidenta.