Tras ser suspendida 120 días por la contratación de una sentenciada por terrorismo en su despacho congresal, la legisladora de Frente Amplio María Elena Foronda expresó su "profunda indignación" y sostuvo que su sanción no tiene fundamentos y que está basada en "mentiras".
"Cuando contrataron a esta persona de parte del Congreso ya había cumplido su pena por lo tanto ya estaba rehabilitada para poder trabaja", dijo Foronda en declaraciones a la prensa.
"Lo dice la misma Constitución política y lo dice el marco normativo. No existe ninguna obligación en el reglamento del Congreso, para que los congresistas hablemos o demos a conocer la vida privada de quienes contratamos por lo tanto no se ha infringido ninguna norma o de código de ética", agregó la legisladora.
En esa misma línea, María Elena Foronda dijo que con esto se confirma que "hay un intento desesperado de ocultar actos de corrupción".
"Quién me acusa? El congresista Héctor Becerril y la verdad que es un galardón. Viniendo de quien viene no tiene ninguna autoridad moral para decirme lo que dice", manifestó Foronda.