(Fotos: Presidencia del Perú)
(Fotos: Presidencia del Perú)

Redacción PERÚ21

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A partir del mensaje que ha dado el presidente Martín Vizcarra, se desprenden varios aspectos claves, como su deseo de enfrentar la corrupción. De manera que esa gran demanda nacional, más aún en tiempos recientes, puede empezar a tener una solución. El nuevo presidente ha dado en el clavo.

Además, ha tenido especial cuidado en desmarcarse de Kuczynski, y de su gobierno, al decir que va a tener un gabinete completamente nuevo. Lo cual es una manera de caer en simpatía a la oposición. Y decir que el Poder Judicial debe investigar todos los casos de corrupción, toca particularmente a PPK por los negocios que hizo cuando fue ministro de Economía.

Por otro lado, creo que ha logrado satisfacer a los distintos sectores en general. Por ejemplo, Moquegua es una región en la que él tuvo éxito, y aunque no se puede comparar con el gobierno central, una de las características que se le reconoce es que hizo dialogar a la autoridad local, provincial, municipal, distrital, empresarios y líderes comunales; y ese es un caso muy emblemático de inversión que se destrabó para dar inicio al proyecto Quellaveco. Eso lo muestra en una faceta de negociador que el país tanto requiere.

Ha dado algunos guiños a la oposición, pero ahora hay que saber quiénes se mantienen como tal, y de qué tipo será, porque si es como la que tuvo Kuczynski, Vizcarra también llegará a sucumbir.

Su respaldo, en el papel, tendría que ser el partido que lo llevó a la vicepresidencia, pero es una bancada pequeña y algunos oficialistas lo emplazaban a que diga qué haría si vacaban a PPK. Ahora mismo no sabemos qué es oposición y qué es oficialismo.

Finalmente, entiendo que es hijo de una maestra y esposo de otra. Por lo tanto, es muy cercano y entiende este sector. El país podría tener gran oportunidad de mejorar su educación pública.