"Él no tiene autoridad moral para polarizar este proceso. Eso es ofender al 65% de los limeños, a los taxistas, ambulantes y comerciantes que apoyan la revocatoria. Tuvimos expectativas en esta gestión, pero luego de casi 2 años la mayoría percibe que no está dando resultados, que la gestión se perdió en el diagnóstico y no soluciona los problemas", sentenció.