En abril de 2016, en plena campaña política y con el tiempo en contra para las elecciones presidenciales que ganó Pedro Pablo Kuczynski, la entonces candidata Keiko Fujimori hizo una promesa respecto a la situación carcelaria de su padre Alberto Fujimori si es que era electa presidenta.
"El poder político no se utilizará para beneficiar a mi padre ni a ningún familiar", expresó en su momento desde el Callao mientras participaba de una bicicleteada.
La lideresa de Fuerza Popular recalcó entonces que el caso de su padre seguiría viendo a través de la vía legal y constitucional, y no por medio de la vía política.
"Es de público conocimiento mi posición personal. He firmado un compromiso de honor", agregó Fujimori Higuchi.
El último jueves, con 55 votos a favor (de congresistas de Fuerza Popular y otros no agrupados) se aprobó el proyecto de ley que promueve el arresto domiciliario para adultos mayores enfermos o que hayan cumplido el 75% de sus condenas.