Dos jueces de la Segunda Sala Penal de Apelaciones que iban a evaluar la apelación contra los 15 meses de prisión preventiva contra Keiko Fujimori decidieron inhibirse del proceso por considerar que ambos ya habían tenido una posición definida por este mismo caso.
César Sahuanay Calsín, presidente de la Segunda Sala de Apelaciones de la Corte Superior Especializada, así como Iván Quispe Aucca, presentaron su pedido para apartarse de este caso. El tercer juez de la Sala, Édgar Medina Salas, evaluó este planteamiento junto a otros dos magistrados que fueron invitados: Sonia Torre Muñoz y Rómulo Carcausto Calla.
Iván Quispe señaló que esta orden de 15 meses de prisión preventiva contra Keiko Fujimori se dictó en base al mismo pedido de prisión preventiva por el cual se pronunció el 3 de enero del 2019, cuando la sala que integra rechazó la apelación y confirmó 36 meses de esta restricción contra la lideresa de Fuerza Popular.
En esa misma línea de pronunció el titular de la Sala, César Sahuanay. “Valorar la resolución apelada, correspondería valorar nuevamente el mismo requerimiento sobre el cual ya tiene su posición, el cual ha sido rechazar categóricamente los argumentos de la defensa técnica de la investigada (Keiko Fujimori)”, planteó el juez.
Ante estos argumentos, los tres magistrados declararon como fundada la inhibición de ambos magistrados, motivo por el cual ellos ya no se pronunciarán sobre los 15 meses de prisión preventiva que dictó el juez de investigación preparatoria Víctor Zúñiga Urday en enero último.
Torre Muñoz, Carcausto Calla y Medina Salas serán, en consecuencia, los tres magistrados que evaluarán la apelación que presentó la abogada Giulliana Loza, defensa de la excandidata presidencial.
Prisión preventiva de Keiko Fujimori
El 28 de enero, Zúñiga ordenó 15 meses de prisión preventiva contra Keiko Fujimori a pedido del fiscal José Domingo Pérez, quien consideró que había nuevas pruebas y elementos que sustentaban que el peligro procesal se había sostenido en el tiempo y agravado con el avance de las investigaciones.
La lideresa de Fuerza Popular había dejado el Penal Anexo de Mujeres en Chorrillos luego que el Tribunal Constitucional aprobara el hábeas corpus que exigía su liberación, por lo que el fiscal Pérez volvió a plantear el pedido de prisión preventiva.
Tras la decisión del 28 de enero, Keiko Fujimori volvió a ser trasladada al mismo establecimiento penitenciario.