El empresario Josef Maiman declara ante el juez Richard Concepción vía videoconferencia. Maiman se encuentra en Israel. (Hugo Curotto/GEC)
El empresario Josef Maiman declara ante el juez Richard Concepción vía videoconferencia. Maiman se encuentra en Israel. (Hugo Curotto/GEC)

El empresario ratificó hoy en audiencia por adelanto de prueba que la empresa Odebrecht transfirió US$31 millones en las cuentas bancarias de sus compañías que estaban dirigidos al expresidente , investigado por lavado de activos.

A través de una videoconferencia desde Israel, Maiman contó que en 2004 fue el exjefe de Estado, su amigo por entonces, quien le pidió recibir “aportes” de la compañía brasileña para el “plan político” que tenía. Y el ciudadano israelí accedió a la petición. “Yo sabía que Odebrecht no podía hacer aportes directos (a Toledo)”, explicó.

A inicios de noviembre de ese año -indicó- fue desde Venezuela a Río de Janeiro, en Brasil, a pedido del exmandatario, quien participaría en una cumbre de presidentes. Fue por dos motivos, según su testimonio: para reencontrarse con el exjefe de Estado, a quien no veía en mucho tiempo, y para reunirse con Marcelo Odebrecht.

Detalló que buscaba tener un acercamiento con Odebrecht porque estaba interesado en hacer negocios juntos en el Medio Oriente y en Egipto. Toledo, según su versión, fue quien habló con el exejecutivo Jorge Barata para que concertara el encuentro, que finalmente tuvo lugar en el Hotel Marriott.

“Toledo me presenta a Barata en el hotel, donde Barata me dice que puedo reunirme con Marcelo (Odebrecht). Todo sucede en el Marriott. Fue una buena reunion porque despertamos el interés de Marcelo (...) la reunión consistió en la presentacion de mi empresa porque queríamos cooperar con Odebrecht en proyectos de otros países”, respondió ante las preguntas del fiscal José Domingo Pérez.

Lo dicho por el ciudadano israelí no es una novedad para Pérez. Maiman Rapaport es colaborador eficaz y ya dio todos los detalles sobre cómo reció las coimas que tenían a Alejandro Toledo como destinatario final.

El contacto de Barata

En otro momento, Josef Maiman narró que, en ese misma estadía, Barata se le acercó para consultarle si Toledo Manrique le había hablado de las "contribuciones" que haría la constructora. Él respondió que sí.

"Nos encontramos varias veces con Barata, quien me preguntó si Toledo me había comentado algo sobre las contribuciones y le digo que sí. No me menciona montos pero me pregunta si yo sería el receptor y le digo que sí. Entonces Barata me dice que se reuniría nuevamente conmigo en Lima", detalló.

En ese mismo mes de noviembre, Maiman reiteró que recibió a Barata en su departamento de Barranco, en Lima, y ahí se le entregó un “borrador” del contrato ficticio que debería suscribir su compañía con Odebrecht para justificar la entrega de dinero. Aunque esa vez no se hablaron de montos de dinero, el exdirectivo sí reveló que eran abonos por el proyecto Interoceánica.

En enero de 2005 hubo otra reunión entre ambos, y allí Maiman se entera que los contratos de servicio serían por US$34 millones 300 mil, y que incluso podían ser retocados en adelante.

“Esos eran documentos ficticios, a mí no me importaba lo que decía y lo único que me interesaba era que yo no debía asumir alguna responsabilidad”, indicó.

Detalló que las transferencias a sus cuentas bancarias las empezó a recibir en la segunda mitad del año 2006. Barata le comunicó antes que se iban a realizar los depósitos, y tras recibir esa confirmación le informó a Toledo de las entregas de dinero.

Precisó, finalmente, que la cifra total que entregó Odebrecht bordeó los US$31 millones. Reveló, además, que también recibió US$4 millones de la constructora brasileña Camargo Correa, que estuvo a cargo del tramo 4 de la carretera Interoceánica.

Actualmente, Alejandro Toledo se encuentra detenido en Estados Unidos mientras afronta un pedido de extradición hacia el Perú. El fiscal Pérez lo acusa de haber favorecido a Odebrecht con la concesión de la Interoceánica a cambio de millonarios sobornos.