La titular del Ministerio Público, Zoraida Ávalos, designó el último jueves a la fiscal María Arango Yamashiro para encargarse, entre otras investigaciones, del caso José Luna Gálvez. Pero tras cinco días de ese nombramiento esta última declinó a ocupar el Cuarto Despacho de Crimen Organizado en la Fiscalía del Callao.
Arango fue una apuesta de Ávalos. Ni siquiera el coordinador nacional de Crimen Organizado, el fiscal superior Jorge Chávez Cotrina, fue consultado para conocer su opinión. Chávez Cotrina, indicaron fuentes a Perú21, se enteró de la designación al leer la resolución publicada en el diario El Peruano.
En el escrito que envió ayer a la fiscal de la Nación, al que accedió este diario, la fiscal Arango indica que “por razones personales” no aceptará el cambio de plaza.
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“Solicito que se me mantenga mi designación en el actual despacho; este es en la Oficina de Apoyo Técnico Judicial”, se lee en el documento fedateado por notario.
La juramentación de Arango estaba prevista para hoy a las 10 de la mañana. Pero ayer comunicó a la Fiscalía del Callao que no asistiría porque había decidido dar un paso al costado. Según las fuentes, la razón de su alejamiento se debió a la atención mediática que tiene este proceso y a la carga de trabajo que le demandaría para adaptarse.
Luna, actual candidato al Congreso, es sindicado de haber pagado sobornos para conseguir la inscripción de su partido Podemos Perú ante la ONPE, en 2018.
Por este caso hubo una disputa entre las fiscales Rocío Sánchez y Sandra Castro. Castro acusaba a la gente de Sánchez de filtrar información a Luna Gálvez. Las peleas llevaron a la inestabilidad del equipo especial del caso Cuellos Blancos, y ambas fiscales fueron removidas de sus puestos.
Zoraida Ávalos ahora deberá pensar en otro reemplazo para este despacho. Y pronto deberá anunciar si acepta las propuestas del fiscal supremo Pablo Sánchez para sustituir a Castro y Sánchez en el equipo especial. Los fiscales Janny Sánchez-Porturas y Arturo Mosqueira están a la espera.
-El caso Luna ya no es parte de la carpeta de Los Cuellos Blancos. Ahora está a cargo de la Fiscalía de Crimen Organizado.
-En la Diviac, que apoya la investigación a los Cuellos Blancos, también sufren cambios. De los 161 miembros, 96 saldrán del sistema.