El fiscal supremo Alcides Chinchay pedirá al Poder Judicial que levante el secreto de las comunicaciones telefónicas del periodista Gustavo Gorriti y conocer así si mantenía llamadas con los fiscales del equipo Lava Jato, Rafael Vela y José Domingo Pérez.
Ese pedido ha sido proyectado por Chinchay en la disposición del 27 de marzo, revelada por Perú21, con la que inició investigación al director del portal IDL-Reporteros.
Pero para empezar, el fiscal Chinchay ha otorgado a Gorriti, Vela y Pérez un plazo de cinco días para que le entreguen los números telefónicos que figuren a su nombre y los que hayan usado entre enero de 2016 y abril de 2021.
Esta decisión ha despertado el rechazo desde distintos gremios y entidades internacionales que alertan la eventual vulneración de la protección de la fuente periodística.
La Asociación Nacional de Periodistas del Perú indicó que el requerimiento “violenta el secreto profesional” y que se trata “de un nuevo patrón de hostilización contra la prensa”.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) también expresó su preocupación por la postura del Ministerio Público debido al impacto que puede tener el despliegue del periodismo de investigación.
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