Gladys Echaíz, ex fiscal de la Nación. (Mario Zapata/Perú21)
Gladys Echaíz, ex fiscal de la Nación. (Mario Zapata/Perú21)

El camino hacia su casa, en La Molina, es empinado. Sorteando los cerros del distrito se llega a una apacible zona en la que nos recibe. es una mujer de impresión adusta que logramos ver sonreír cuando dice que quiere mucho a la que fue, es y será su institución. Reconoce que la ruta para devolver a la ciudadanía la confianza sobre el Ministerio Público () está más cuesta arriba que la zona donde se realiza esta entrevista. Los tiempos difíciles, sin embargo, podrían ser peores si es que, dice, no se trabaja en la prevención. Esa es la gran tarea de , el nuevo titular.

¿Desde cuándo conoce a Pedro Chávarry?
Desde el año 86. Hemos compartido la Junta de Fiscales Provinciales. Nos reuníamos para unificar criterios de interpretación de la ley, para ver la administración de nuestros despachos y para adoptar acuerdos de las problemáticas del momento y transmitirlos como aportes u opiniones al fiscal cercano, que a su vez los elevaba al fiscal de la Nación.

¿Tiene buen concepto de él?
Sí, y deseo que haga una buena gestión por el bien de la institución y del país. Espero que tenga la fuerza suficiente para rodearse del personal idóneo y cumplir los objetivos que pueda haberse trazado. Ha sido elegido por unanimidad, eso dice bastante. Ser fiscal de la Nación es muy difícil.

Y vale la pena conocer su perfil. ¿Usted cree que está vinculado al Partido Aprista?
Mire, cuando uno ingresa a las instituciones de la administración de justicia, deja de lado cualquier vinculación que pudiera haber tenido. Si tiene 40 años en la actividad como fiscal, imagínese, cualquier vinculación ya acabó. Yo no conozco ni he oído hablar de acercamientos con algún partido.

También fue secretario general de Blanca Nélida Colán.
Hay muchas personas que han trabajado con la doctora Colán, Pablo Sánchez también. En ese tiempo se sacaban resoluciones y se cumplían. No sé si alguno se haya negado, yo no lo recuerdo.

Cuando uno entra a la función pública, el bien es público y ya no personal, pero, así como hay buenos y malos funcionarios, también hay buenos y malos magistrados.
Así es, pero al doctor Chávarry yo no lo ubicaría dentro de los malos. Lo he conocido en su oficina, abocado a sus temas, disciplinado. Fue presidente de la Junta de Fiscales Superiores; es decir, gozaba de la confianza de todo el grupo de fiscales superiores que no son tan fáciles de trabajar.

¿Ha cumplido una buena labor como fiscal?
No sé, en el trabajo de cada oficina son los litigantes o los jueces los que pueden decirle a usted si el trabajo estuvo bien o no, más aún porque antes sí se respetaba la reserva de los procesos, no se ventilaban públicamente sino hasta llegar a la fase correspondiente, que eran los juicios orales.

¿Esa es una arista del trabajo fiscal que debe cambiar?
La ley se da para establecer el orden. Si nosotros no respetamos la ley, ¿cómo podemos exigir que se respete?

¿Los fiscales no han respetado la ley?
Yo no sé, yo veo que públicamente se ventilan procesos cuando la reserva es obligatoria. Eso pasa en todos los procesos. Cuando yo estaba en actividad, si había una cosa así, sancionaban al fiscal.

Los ciudadanos, cuando vemos ciertas acciones o inacciones de fiscales, exigimos muchas cosas. ¿Usted, que ha sido parte del MP y conoce la institución, qué cree que podríamos exigirle realmente al MP ahora, con un nuevo titular?
Trabajo oportuno, transparencia, seriedad, pero apoyar dando apoyo logístico, poniendo lo que se requiere para avanzar rápido, como peritos, personal de apoyo. Si quiero trabajar rápido, hablar con el presidente de la junta y decirle que controle el avance, cómo van los atrasos, por qué un fiscal tiene tantos expedientes, por qué este tema no ha sido calificado. Del caso grande está pendiente todo el mundo, pero del caso de Juan Pérez no, y él está necesitando que la justicia venga. De esos casos se forma la opinión de la gente sobre las instituciones.

Hace falta liderazgo.
Lógico, un fiscal de la Nación tiene que ser un líder, tener conocimiento de gestión, organización, planificación, supervisión. Yo me imagino que el doctor Chávarry ya tiene un objetivo trazado acorde con el momento que vive el MP. Si está caminando bien, reforzarlo. Si hay alguna debilidad, ver la causa. Si hay que sacar, se saca, y si hay que cambiar, se cambia. Se debe trabajar con gente que se identifique con el proyecto que se tiene en mente.

¿Hubo una carencia de liderazgo en el MP?
No sé, yo no he estado cerca de la gestión del doctor Sánchez. Al doctor Chávarry sí lo he visto en el tiempo en que fui fiscal de la Nación y fue un gran apoyo. Espero que esa experiencia le sirva ahora para transmitirle a la población la seguridad y la confianza que necesita en sus autoridades, la cual ahora está resquebrajada a nivel general, no solo en la justicia. Hay que confiar en las personas. Los juicios de valor se emiten al final.

¿Entonces, qué nota le pone a Pablo Sánchez?
No he estado cerca de su gestión, no podría evaluarlo. Quienes deben hacerlo son los propios fiscales que han estado ahí. Ellos sabrán si ha tenido una política de comunicación, de puertas abiertas, si los han escuchado...

¿Qué retos tiene Chávarry?
Estamos viviendo una situación difícil, de mucha desconfianza, de turbulencia, de violencia verbal. Mire una sesión del Congreso. En la calle vemos puros maltratos, violencia. ¿Qué está pasando, qué podemos hacer? La institución tiene que analizar eso. ¿Cree que con la ley lo vamos a solucionar? Ahorita se tiene que fortalecer el área preventiva porque la pena no corrige a nadie. Si no se trabaja preventivamente, oiga lo que le voy a decir, nos esperan tiempos muy difíciles.

AUTOFICHA

“Fui fiscal de la Nación de 2008 a 2011. Renuncié en 2014 porque no podría seguir trabajando donde ya no me querían. Ahora estoy disfrutando a mi familia, es algo que no tuve la oportunidad de hacer. No gocé de mis hijos cuando estaban chicos, ahora los estoy gozando de adultos”.

“El fiscal de la Nación tiene que buscar los mejores cuadros. Será difícil porque los cuadros no los pone él, los pone el CNM y de eso él tiene que escoger. El sistema de elección del CNM no tiene filtros para determinar si usted es bueno o malo, honesto o deshonesto, capaz o incapaz”.

“Solo los fiscales provisionales son puestos por el fiscal de la Nación y estos son los que más trabajan. He escuchado que algunas personas dicen que los fiscales provisionales son los culpables de ciertas malas acciones, pero esa es una gran mentira. El problema son las personas”.