Esta mañana el fiscal José Domingo Pérez, miembro del equipo especial Lava Jato, llegó hasta las instalaciones del penal Anexo de Mujeres de Chorrillos con el fin de recoger el testimonio de Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, en el marco de las investigaciones por los presuntos aportes ilegales de Odebrecht a la campaña del 2011.
Sin embargo, Fujimori, quien permanece allí desde noviembre de 2018, permaneció en silencio ante el fiscal. No dijo ni una palabra argumentando que con ella se comete un exceso.
► Keiko Fujimori decidió guardar silencio en interrogatorio programado para hoy
Es así que el fiscal se retiró del establecimiento penitenciario, pero no se imaginaría que su salida sería tan abrupta. A las afueras del recinto lo esperaban decenas de simpatizantes fujimoristas, que ni bien lo vieron le comenzaron a lanzar gritos ofensivos.
A pesar de que efectivos de la Policía lo resguardaban, los simpatizantes -que eran más- lanzaron objetos contra el fiscal.
José Domingo Pérez incluso se tropezó ante el tumulto, mientras se cogía la cabeza para protegerse.
Tras varios segundos de angustia, el fiscal finalmente ingresó a la camioneta que lo trasladaría.