Con el anuncio del presidente Martín Vizcarra el último domingo, en el que pidió al Congreso que acelere con los proyectos de reforma política y judicial, y a través del cual anunció la cuestión de confianza, hemos visto que el Congreso, a través de sus comisiones respectivas, ha acelerado el trabajo.
La respuesta de si el presidente hizo bien o no al dar este anuncio la vemos con los hechos que trajo este mensaje, con los resultados, como la aprobación en las comisiones de la reforma del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM).
Con esto también se demuestra que con voluntad política se pueden acelerar las cosas. Los congresistas han respondido a la altura de lo que el momento requería.
En cuanto a la cuestión de confianza que pedirá el premier César Villanueva, se ha visto que las inclinaciones apuntan a que las bancadas se la otorgarán. Es más, sería muy difícil que no se la den. ¿Por qué se la negarían? Sería inoportuno hacerlo en estos momentos.
En cuanto a los encuentros y desencuentros entre el Ejecutivo y el Legislativo, estos van a continuar, pero por periodos, hasta julio de 2021. Esta situación sucede con mayor frecuencia cuando un presidente no tiene una mayoría en el Congreso.