Luego del aluvión de 21 candidaturas para la Alcaldía de Lima, el ex jefe de la ONPE, Fernando Tuesta, hace una pausa en su día de descanso y nos contesta el teléfono para analizar esta situación. ¿Por qué hay tantas postulaciones? La respuesta en la siguiente entrevista.

Son 21 listas las que se han presentado para postular a la Alcaldía de Lima, ¿qué lectura le da a este elevado número?
Primero, ¿se hace más política con tantas listas? No. En Lima no hay candidatos con atracción, y por eso se presentan varios. Esto hará que la intención de voto entre los primeros sea relativamente baja y, por lo tanto, es difícil tener un escenario de ganador. En realidad se presentan 21, pero son 23 los partidos inscritos, ya que el Apra y el Partido Nacionalista no se presentaron.

El número no significa que existan partidos fuertes. Por ejemplo, hay quienes postulan a personas que no militan en sus agrupaciones.
Es que algunos postulan porque quieren competir y ganar, pero otros porque han ofrecido sus partidos. Esto multiplica los vientres de alquileres.

En los últimos días, el JEE ha detectado errores en las solicitudes de inscripción. ¿No es eso una negligencia de parte de los partidos teniendo en cuenta que tuvieron tiempo para tener todo en regla?
Eso es muy recurrente. En más de una ocasión han llenado un documento diciendo que sí hubo elecciones internas. Los partidos son extremadamente débiles, pero ojo que varios han sido declarados inadmisibles, aún pueden subsanar. Distinto es el caso de los improcedentes, porque ahí la cosa es de otra naturaleza.

Hasta ahora son tres listas para Lima que han sido declaradas improcedentes: Todos por el Perú, Juntos por el Perú y Democracia Directa.
Aún pueden apelar al JNE, y en algunos casos ratifican la decisión del JEE. En consecuencia recién conoceríamos el número total de listas en la segunda quincena de julio.

¿Es negativa esta situación?
Lo que va en contra de una buena competencia es que existan tantos partidos inscritos. Hay 23 organizaciones, y probablemente no todas han cumplido con los requisitos. Entonces, ¿por qué están ahí? Hay varias respuestas, por ejemplo que hay un mercado negro de firmas. Además, la propia Ley Electoral modificada ha permitido este número porque contabiliza las candidaturas que se retiraron de los comicios de 2016. Hicieron campaña y se retiraron, pero al no participar bien pudieron perder su inscripción como dice la ley.

¿Lo ideal sería que fuesen 23 partidos inscritos pero con una organización fuerte?
Lo ideal es tener un diseño donde los requisitos sean realmente verificables. No más esta suerte de firmas válidas y ser exigentes cuando pierden la inscripción. Así habría partidos más organizados y representativos.

¿En ese contexto, cuántos debieron participar en estas elecciones para Lima?
Seis y punto, los partidos que tienen representatividad en el Congreso, pero los otros están inscritos cuando debieron perder su inscripción.

Se han visto postulaciones que, digamos, le han sacado la vuelta a la no reelección.
Es cierto que muchos quieren extender su nivel de influencia colocando a familiares. Sin embargo, creo que impedir la reelección es un error porque el argumento para que se eliminara es que evitaba la corrupción, pero en el Perú la tasa de reelección es baja y hay alcaldes que han hecho una buena gestión.

Al final eso depende del propio elector.
Por supuesto, una ley no puede ser paternalista, debe encuadrarse en el marco de la competencia, pero no puede ir a un plano de intervención que limita algunas posibilidades.