María del Carmen Alva
Amedrentamiento
La presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, denunció que ha recibido amenazas –a través del teléfono celular de una de sus hijas– para que renuncie al cargo. “Te estás pasando de la raya, te hemos dejado actuar a tus anchas... tienes hasta el viernes para renunciar”, se lee en uno de los mensajes enviados desde un número con código internacional. Ante ello, la acciopopulista dijo que no se dejará amedrentar.
Edwin, el indignado - I
¿Calidad moral?
Tras su intervención, legisladores de distintas tiendas políticas le expresaron su solidaridad. Entre ellos su desubicado correligionario Edwin Martínez, quien, sin ton ni son, arremetió contra los periodistas. “No se ensañen con la presidenta (Alva), no se ensañen con los congresistas porque el barro que nos han tirado no salpica solo al Congreso sino a nuestras familias. Yo tengo calidad moral para decirle a los medios que si tengo algo de qué arrepentirme, es de no haber encarado los látigos que nos ha dado la prensa...”, comentó.
Edwin, el indignado - II
Ampay, congresista
A ver, vamos por partes y cucharadas. ¿De dónde le salió la patería con Alva a Martínez si hace apenas unos días afirmó que sus declaraciones respecto a que las Fuerzas Armadas están con el Congreso eran “desbocadas”? Y, segundo, ¿a qué vino su ataque a la prensa? ¿Será acaso porque, en enero, fue la que lo puso al descubierto por un audio que se filtró en una sesión de la Comisión Permanente y en el que le escucha tratando de interceder por su hijo ante un policía en pleno operativo? “A ver, pásamelo, pásamelo, pero al comisario avísale, pásamelo a quien esté”, se le escuchó decir. Para hablar y comer pescado...