En un manifiesto, al cumplirse un año de las elecciones edilicias, usted advierte de que no existe un plan serio para Lima.Lamentablemente, y eso que trato de mantener una posición constructiva, pero no hay un plan, como se ve en el transporte público. No se nota que haya un horizonte, una visión, un sueño para Lima. No nos dicen cómo quieren enfocar la ciudad en los próximos años.
¿Considera que hay un manejo improvisado?El mandato es de cuatro años y ya no estamos para improvisar con cada alcalde que entra. Él debería afrontar este tema con responsabilidad. Por lo que me cuentan los regidores, el señor Castañeda no se deja ayudar mucho. Trabajan muy solos, se encierran, no son muy transparentes.
Usted señala que tampoco atienden las propuestas de la bancada aprista…Propusimos que se reconocieran los corredores y se planteara un sistema integral de transporte, eso no es considerado, seguimos pensando como compartimentos. El Metropolitano se llama Castañeda, los corredores se llaman Susana y el tren se llama Apra o Alan García.
¿Cómo terminará Lima si sigue la improvisación y no se tiene un plan serio?Prefiero pensar que Castañeda se va a rectificar.
En su manifiesto también afirma que no postulará en el 2016. ¿Es definitivo?Es definitivo. No tengo ninguna intención (de postular). Mi convicción es que no debo participar, no por cálculo sino por coherencia. Siempre critiqué a los que prometen que cumplirán un cargo público, pero antes de terminar su periodo ya se dedican a otra cosa.
Coincide con Javier Velásquez en el sentido de que Alan García es la única carta para el 2016?En el partido hay muchas personas que tienen la posibilidad de candidatear, pero en este momento García es el candidato y seguramente será elegido.
Se rumoreó que usted le haría "la lucha" a García.Nunca lo pensé.