Entre la multitud de simpatizantes que aguardaban la llegada del candidato presidencial Pedro Castillo para el mitin en la explanada de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA), en Puno, se confundía la figura del fundador del Conare Sute, César Hugo Tito Rojas.
Ese lunes 31 de mayo, el sindicado miembro del Movadef, el brazo político de Sendero Luminoso, encabezaba una movilización de maestros que portaban con orgullo una pancarta que llevaba el nombre del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación (Sute).
“¡Castillo presidente! ¡No al continuismo! ¡Fujimori nunca más!”, gritaba Tito a todo pulmón. De la misma forma intervino en la marcha denominada “Keiko no va” que se realizó el 22 de mayo. Ese mismo día, el radical sindicalista se encontraba recorriendo la calle Lima, en Puno, junto a un grupo de profesores que llevaban un banner del SUTE, constató Perú21.
Cuando fue consultado sobre el motivo de su participación, alegó que la protesta se acataba en contra de la mafia que manejó el país durante 30 años y en respaldo a Pedro Castillo.
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“Basta de gobiernos corruptos neoliberales, la señora Fujimori representa a toda esa mafia de la derecha en nuestro país; por lo menos, dentro del plan de gobierno de Castillo está cambiar la Constitución y nacionalizar algunos recursos y que se revise algunos contratos”, dijo.
César Tito está en el radar de la Policía. De acuerdo a informes de inteligencia, entre el 2000 y el 2004 visitó a internos condenados por terrorismo en el penal de Yanamayo.
En el 2010, César Tito formó parte del comité electoral que eligió a la directiva nacional del Movadef. Tres años después el dirigente magisterial pasó a presidir el Conare Sute, una de las facciones más radicales del magisterio y, según la Policía, una fachada del senderismo.
En junio del 2012, declaró públicamente ser militante del Movadef; en mayo del 2014 fue denunciado por la Fiscalía por el delito de terrorismo con otros fundadores del Conare Sute.
A pesar de figurar actualmente como militante del partido Frente Amplio, según registros del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), su fascinación hacia Pedro Castillo lo impulsa a participar en cuanta marcha o actividad se convoca contra Keiko Fujimori, la contendora política.
En 2017, además, participó de la huelga de maestros que lideró Pedro Castillo y que desestabilizó al gobierno de Pedro Pablo Kuczynski. Aquella vez, la Procuraduría del Ministerio del Interior los denunció por organización criminal y sindicó a Tito de ser el cabecilla.
En esas manifestaciones, cientos de profesores marchaban portando el mismo símbolo que hoy en día representa a Perú Libre. La candidatura de Castillo ya se venía cocinando con anticipación.