El jefe del gabinete, Juan Jiménez Mayor, se pronunció sobre el pedido de los facilitadores del diálogo en la Cajamarca, el monseñor Miguel Cabrejos y el padre Gastón Garatea, quienes pidieron al Gobierno que levante el estado de emergencia en esa región.
El premier subrayó que para ello deben existir garantías necesarias de parte de las autoridades y dirigentes cajamarquinos, que insisten en convocar a un nuevo paro contra el proyecto minero Conga pese a estado de excepción.
"Si en Cajamarca existen garantías para poder levantar el estado de emergencia, el Gobierno la va a hacer (…) pero existe la necesidad que las autoridades de den señales claras de que van a deponer cualquier acción de fuerza, cualquier acción que impliquen disturbios o afectación de derechos", dijo Jiménez en el Congreso, donde acudió para sustentar el pedido del Ejecutivo para legislar sobre los sueldos de policías y militares.
En ese sentido, enfatizó que espera las "señales" correspondientes, porque la principal la misión del Gobierno nacional es garantizar el orden y la paz, así como el ejercicio pleno de los derechos de todas las personas.
"Exhortamos a las autoridades de Cajamarca a que nos den esas señales para poder efectivamente avanzar en esta ruta del diálogo", dijo a los periodistas en el Palacio Legislativo.