El 3 de agosto, el fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, envió un oficio al entonces encargado de la Fiscalía Suprema de Control Interno, Víctor Rodríguez Monteza, para que investigue “a las personas involucradas en la irregular divulgación de los audios”.
El documento fue recibido por el funcionario el 6 de agosto y ayer el Ministerio Público (MP) aclaró que esto solo involucraría a los colaboradores de esa institución.
Pero la decisión del MP generó varios cuestionamientos, como el del ex procurador Yván Montoya, quien señaló que Chávarry solo demuestra su preocupación por la difusión de las conversaciones, en lugar del tema de fondo. “Su preocupación es por los eventos colaterales y no por el contenido de los audios”, sostuvo.
El ex procurador consideró que el documento es un mensaje de Chávarry “en el que quiere decirles a los fiscales que tengan cuidado de no mantenerlo informado”.
En tanto, el analista político Fernando Rospigliosi indicó que la decisión del fiscal de la Nación generará un incremento en el rechazo a su gestión, lo que podría intensificar el pedido desde distintas instancias para que deje el cargo.
Por su parte, el abogado Enrique Ghersi señaló que, si bien el MP tiene derecho a hacer las investigaciones que considere, debe cuidar que no involucre a los medios de comunicación porque “afectaría el derecho a la libertad de prensa”.