Luego de que Perú21 informara que los congresistas Marisol Espinoza (APP), Javier Velásquez Quesquén (PAP) y Héctor Becerril (FP) interpusieron recursos para que sea el fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, quien los investigue por el caso Los Wachiturros de Tumán, se conocieron dos hechos particulares relacionados al legislador de Fuerza Popular.
Dos denuncias presentadas contra Becerril por el procurador anticorrupción Amado Enco están congeladas en el Ministerio Público.
La primera se remonta a junio de 2017, cuando Enco solicitó al entonces fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, que investigue al citado legislador por presunta negociación incompatible, por haber exigido celeridad a tres funcionarios en la resolución del conflicto en el que estaban enfrentados la azucarera Agro Pucalá y sus trabajadores por el control administrativo de la empresa.
La segunda fue interpuesta en julio de este año para que se esclarezca si el parlamentario presionó al ex consejero Baltazar Morales para que, en febrero del año pasado, votara por Julio Gutiérrez Pebe como presidente del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM).
Desde el 20 de julio, ambos casos pasaron a manos de Chávarry, quien ha debido darles trámite. Perú21 consultó sobre la situación de las denuncias con fuentes fiscales, quienes nos dieron cuenta del proceso.
Indicaron que el primer expediente se encuentra en manos de la Junta de Fiscales Supremos listo para ser delegado –13 meses después– al fiscal que se encargará de su conclusión.
En el proceso sobre el CNM, indicaron que Chávarry se abstuvo de atender la investigación y ahora es el fiscal supremo Pablo Sánchez el encargado. Este diario intentó comunicarse con Sánchez para tener detalles del caso, pero no contestó a nuestras llamadas.