El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dio por superada la crisis diplomática con Perú tras el retiro mutuo de sus embajadores. El impasse se originó cuando el exrepresentante ecuatoriano en Lima, Rodrigo Riofrío, se vio envuelto en una pelea en un supermercado de Magdalena con dos compatriotas, el pasado 21 de abril.
"Con la cesión en sus funciones del embajador Riofrío y la cesión en sus funciones del embajador (peruano) Javier León, para nosotros está total y absolutamente superado este incidente", afirmó el mandatario durante una rueda de prensa en Guayaquil.
Correa recordó que si Riofrío no volvía a su cargo en Perú, tampoco lo podría hacer León a Quito. "Y así ha sucedido y vean que hemos cumplido exactamente con lo que hemos dicho", destacó.
El gobernante comentó que fue Riofrío quien presentó su renuncia, ya que él no lo iba a retirar "porque no sacrifico inocentes, ni tampoco sacrifico la verdad por presión o por escándalos que se hagan con complicidad de cierta prensa en Ecuador".