La cuestión de confianza planteada por el Poder Ejecutivo fue aprobada en el pleno del Congreso tras dos días de debate a fin de que se aprueben seis de los doce proyectos que el presidente Martín Vizcarra presentó al Legislativo.
La votación final registró 77 votos a favor, 44 en contra y 3 abstenciones. Tras ello, la bancada de Nuevo Perú fue la primera en pronunciarse y señaló que queda una ardua tarea por defender “los intereses de la mayoría de peruanos”.
“Nos queda un gran trabajo por delante. El día de hoy el Congreso le habrá dado un voto de confianza al Gobierno, pero no le ha dado un voto de confianza al país y es la tarea que tenemos desde Nuevo Perú”, dijo el vocero de la bancada, Richard Arce.
La Célula Parlamentaria Aprista fue la siguiente en ofrecer una conferencia de prensa para expresar su postura. El legislador Mauricio Mulder aseguró que la aprobación no está sujeta “a una interpretación posterior” de plazos o contenidos.
“Los proyectos de ley que la Comisión de Constitución va a empezar a debatir no están sujetos a que se tenga que aprobar tal como vienen o a secas a efectos de que después el Gobierno tenga que aprobar este voto”, expresó.
El vocero de Fuerza Popular, Carlos Tubino, explicó que su bancada votó de forma dividida sobre el pedido de cuestión de confianza porque hubo "libertad de pensamiento" para decidir el voto.
“Acá nadie cumple órdenes, me hubiera gustado que cumplan órdenes, porque yo vengo de la vida militar, pero estoy en otro mundo, en un mundo político donde hay libertad de pensamiento”, señaló.
Héctor Becerril, también congresista de esta bancada, remarcó que si bien la confianza le ha sido otorgada al Poder Ejecutivo, ello no significa que el Congreso vaya a votar “en el tiempo que el Ejecutivo quiere y tampoco en el sentido que ellos quieren”.
De otro lado, Gilbert Violeta, quien actualmente se encuentra no agrupado luego de que el martes su bancada Concertación Parlamentaria se disolviera, aclaró que tras esta votación, no hay “ganadores y perdedores”.
“Yo creo que aquí todos tienen que ceder un poco. Por un lado, la Comisión de Constitución debe aprobar un calendario y por otro, el presidente del Consejo de Ministros y el ministro de Justicia deben venir al Parlamento y debatir tema por tema”, indicó.