El presidente de la Confiep, Martín Pérez, admitió este jueves que "fallaron los controles internos" en su organización y, por ello, no se pudieron detectar a tiempo las irregularidades en las que incurría su ex segundo vicepresidente, Lelio Balarezo, condenado a cinco años de prisión efectiva por el delito de defraudación tributaria.
Pérez señaló que el caso ha mortificado al gremio y reiteró su rechazo a estas prácticas "que no representan a la mayoría de empresarios honestos del país".
"Personalmente, haré el esfuerzo para que Confiep tenga a los mejores representantes y reitero que si siento que no vamos a lograr este propósito, yo daré un paso al costado", enfatizó el dirigente gremial en un acto de la Contraloría.
Por otro lado, lamentó lo ocurrido el miércoles en Islay, en referencia a los sectores antimineros que abandonaron la mesa de diálogo en Tía María."Nadie en el país puede rechazar el diálogo, eso no podemos permitirlo", manifestó.
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