La mayoría de miembros de PpK se sienten reconciliados con el presidente Martín Vizcarra, aunque no se dicen lo mismo del premier César Villanueva. (USI)
La mayoría de miembros de PpK se sienten reconciliados con el presidente Martín Vizcarra, aunque no se dicen lo mismo del premier César Villanueva. (USI)

Si algo quedó claro para el presidente como para los parlamentarios que se reunieron con él en un restaurante sanisidrino, la noche del martes, fue que el escollo para una buena relación Ejecutivo-bancada no está en , sino en el inmueble contiguo: la .

Como anfitrión del encuentro, el jefe de Estado llegó puntual al restaurante sanisidrino al que convocó a los legisladores con pocas horas de anticipación. No todos pudieron asistir. Algunos como Jorge Meléndez se encontraban en sus regiones aprovechando la semana de representación. Otros como Juan Sheput y Guido Lombardi, los más críticos al Ejecutivo, se excusaron.

Solo ocho de los 14 miembros de (PpK) participaron en la tan esperada reunión con el mandatario. Fue, a decir de algunos asistentes, una reunión distendida, coloquial, con intercambio de anécdotas y una que otra chanza a Sergio Dávila, el “canciller” de la bancada, llamado así por sus continuos viajes... a provincias.

Hubo piqueos, gaseosas y una cena de carnes rojas asentada con una copa de vino que dio pie para revivir una escena ya olvidada en la memoria de los presentes: Martín Vizcarra y Mercedes Aráoz compartiendo el mismo plato. “Como lo hacíamos en campaña”, rememoraron.

Frente a frente

Pero así como hubo tiempo para las bromas, también lo hubo para el análisis serio sobre la relación entre Ejecutivo y el bloque. No hubo mea culpa, pero sí demandas de mayor coordinación con la bancada. ¿Gobiernista? Pues sí. Gilbert Violeta lo ratificó. Sin embargo, dicen las fuentes que a la interna hay quienes todavía tienen reparos. Y no por el presidente, aclaran.

Para ellos, la piedra en el zapato es el premier . Sus coordinaciones con Fuerza Popular saltándose a la garrocha a PpK son “un error que debe ser corregido”, ha dicho Ana María Choquehuanca. El reclamo lo harán cara a cara, en el encuentro que sostendrán el martes 3, aunque la ilusión de Vizcarra sea más bien que se fume la pipa de la paz.