SON MENOS. Con las renuncias, Ética se queda con catorce miembros, ocho de ellos de Fuerza Popular. (Renzo Salazar/GEC)
SON MENOS. Con las renuncias, Ética se queda con catorce miembros, ocho de ellos de Fuerza Popular. (Renzo Salazar/GEC)

A través de un oficio enviado ayer por la tarde al presidente del Congreso, Pedro Olaechea, los voceros de cinco bancadas informaron su decisión de retirarse de la .

Las agrupaciones parlamentarias Peruanos por el Kambio, Nuevo Perú, Frente Amplio, Bancada Liberal y Unidos por la República fundamentaron su posición en que se ignoraron sus pedidos para que el grupo de trabajo se recomponga con un congresista por bancada.

El último miércoles, el Pleno aprobó, previo acuerdo de la Junta de Portavoces, que la Comisión de Ética tenga 19 integrantes, 8 de ellos de Fuerza Popular (FP), con el fin de sumar a las nuevas bancadas.

“No hay un verdadero equilibrio porque FP mantiene 8 representantes, sin contar a sus aliados”, señala el oficio.

“Estamos pidiendo que todas las bancadas tengan la misma representación, para que Fuerza Popular deje de utilizar la Comisión de Ética para blindar a sus amigos”, dijo Gino Costa (Bancada Liberal), quien dio una conferencia de prensa junto con los demás voceros.

A su turno, Patricia Donayre (Unidos por la República) le pidió a Janet Sánchez (Contigo), presidenta de Ética, que impulse el proyecto de ley que ella misma presentó en setiembre de 2018 para que su grupo tenga un miembro por bancada.

“Le pedimos a Sánchez que en un acto de imparcialidad pida que se apruebe este proyecto que se mantiene en la Comisión de Constitución y Reglamento”, dijo Donayre.

Las cinco bancadas también están en contra de que Janet Sánchez mantenga la presidencia de Ética porque consideran que tiene vínculos con Fuerza Popular.

La conferencia de prensa se produjo minutos antes de que se inicie la sesión de la Comisión de Ética. Al término de esta, Sánchez se pronunció por las renuncias.

“Yo no he cometido ningún tipo de falta ni delito para renunciar a la presidencia. Hay congresistas que seguramente simpatizan con los sancionados por esta comisión, pero no se puede ir al extremo de pedir mi renuncia”, aseguró.

Además, dijo que aún espera que la Comisión de Ética tenga una composición equilibrada, pero no explicó cómo impulsará ese cambio. “Sería importante que este proyecto se vea ahora”, acotó.

Tres investigados

A pesar de que las denuncias contra congresistas por tener familiares trabajando en el Parlamento o que han contratado con el Estado implican a once legisladores, la Comisión de Ética solo abrió ayer investigación preliminar a tres.

Se trata de los legisladores Segundo Tapia, Federico Pariona y Elard Melgar, los tres de FP, por contratar entre sí a sus respectivos familiares.

Este diario denunció que el sobrino de Maritza García fue contratado en el despacho de su colega de bancada por dos meses.