César Nakazaki renunció hoy al patrocinio de Alberto Fujimori en todos los procesos penales y procedimientos preliminares que estaban a cargo de su estudio de abogados, a ocho años de haber tomado su caso.
«Las causas de la renuncia, como corresponde, quedan en el ámbito del secreto profesional, luego de haber sido hechas conocer a nuestro patrocinado», dijo en un comunicado. Sin embargo, indicó que era «imposible» continuar en la defensa del exmandatario, condenado a 25 años de cárcel por delitos de lesa humanidad y corrupción.
«Dios permita que algún día, pese a todo, Alberto Fujimori recupere su libertad, pues reiteramos nuestra absoluta convicción de la terrible injusticia que significa dejarlo morir en prisión», señaló el bufete de abogados Sousa & Nakazaki.
Esta decisión se da luego de discrepancias entre Nakazaki y la familia del expresidente respecto a la estrategia legal. En junio pasado, Keiko Fujimori cuestionó que el abogado no haya recusado en su momento a César San Martín, Víctor Prado Saldarriaga y Hugo Príncipe Trujillo, vocales supremos que condenaron a su padre.
Hace dos semanas, Fujimori Fujimori presentó, en una carta enviada al Poder Judicial, a William Paco Castillo Dávila, abogado que estaría a cargo de tramitar su arresto domiciliario y de la revisión de las sentencias en las que participó César San Martín. Este letrado dijo que su intención no era desplazar a Nakazaki.
