La reunión privada con Biden –la que aseguraron, incluso, que ya estaba agendada- fue el argumento con el que varios ministros, incluido el premier Alberto Otárola justificaran que el Congreso le otorgue el permiso a Boluarte para viajar a Estados Unidos y esté presente en la Cumbre de Líderes de la Alianza de la Prosperidad Económica en las Américas (APEP). Así fue, el último martes 31 de octubre, el Pleno aprobó el viaje de la mandataria, en lo que fue su cuarta salida del país en tres meses. La anunciada reunión privada nunca se concretó, aunque la Cancillería informó que esta cita bilateral se realizó sin protocolo porque “los tiempos quedaron cortos”.