La Junta de Portavoces prefirió lavarse las manos y decidió no debatir en un Pleno extraordinario la modificación o derogación de la cuestionada ley de crimen organizado.
En su intención de mantenerse lo más lejos posible de esta propuesta, los representantes de las bancadas congresales decidieron que esta sea evaluada en la Comisión de Justicia.
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El dictamen, de esta manera, seguirá su curso regular. Así, la lucha contra el crimen organizado continuará debilitándose y perjudicando, por ejemplo, los allanamientos.
Muy temprano, el presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, había reconocido errores en la aprobación de esta norma y adelantó que plantearía su revisión o derogatoria ante la Junta de Portavoces.
“Hay defectos en la misma. Hay que mejorar, básicamente, lo que se refiere al allanamiento, que básicamente siempre se ha utilizado como una herramienta sorpresiva; también la definición del delito, que aparentemente habría excluido varios delitos penales graves”, dijo el apepista. Horas más tarde, sin embargo, su propuesta sería rechazada. Solo las bancadas de Juntos por el Perú, Bloque Democrático y Bancada Socialista se mostraron a favor de que la propuesta de Salhuana sea vista de urgencia en el Pleno.
Ahora todo queda en manos de Justicia, una comisión presidida por Perú Libre, bancada que votó a favor de esta ley que ya viene complicando los allanamientos.
Pero entre los portavoces tampoco hubo acuerdo para debatir hoy con urgencia, pese al pedido del Ejecutivo, el dictamen sobre la ley de terrorismo urbano. Este será debatido este jueves informó el titular del Ejecutivo.
Mientras, el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, anunció que el Gobierno ya elabora un proyecto de ley sobre este tema que incluirá los delitos de extorsión, sicariato, secuestro y posesión ilegal de armas.
EJECUTIVO PARTIDO
Pero las discrepancias por el tema de la seguridad ciudadana y la criminalidad también alcanzan al Ejecutivo. El ministro de Defensa, Walter Astudillo, señaló que el estado de emergencia no es la solución del problema de inseguridad que vive el país, en lo que parece ser una disonancia con la decisión tomada por el Ejecutivo, medida que incluso fue anunciada por él mismo el último jueves.
Para el exministro del Interior Mariano González, este nuevo estado de excepción declarado por el Gobierno es una medida desesperada. “Esto demuestra que el Gobierno no tiene un norte. Esto implica que el Estado ha sido desbordado totalmente y lo que está reconociendo tácitamente el gobierno de Dina Boluarte es su incapacidad para dirigir el Estado, es decir, reconoce de una u otra manera que no tienen la más mínima idea de lo que tienen que hacer”, señaló Perú21TV.
Para González, una tarea esencial en esta lucha contra la criminalidad es la derogatoria de la ley del crimen organizado. “Es imposible continuar con esta ley que prácticamente ha fracturado toda la lucha contra el crimen organizado y más bien ha sido promulgada con una iniciativa realmente malévola desde el Congreso”, dijo.
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