Gerardo Távara presidió Transparencia hasta julio de este año  (Foto: GEC)
Gerardo Távara presidió Transparencia hasta julio de este año (Foto: GEC)

Redacción PERÚ21

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El pasado 1 de julio, el abogado informó sobre su renuncia a la Secretaría General de la , cargo que ejerció desde el 2012. atribuyendo esta salida a una “decisión personal”.

Sin embargo, solo tres meses después, Transparencia decidió revelar las verdaderas razones por las cuales Távara abandonó su cargo. Según un comunicado enviado por esta asociación, esta información se hizo pública, debido a que se estarían difundiendo datos inexactos respecto a este caso. Adicionalmente se adjuntó la resolución del consejo directivo.

“En vista de que se han difundido informaciones no veraces sobre los motivos de la renuncia del Sr. Gerardo Távara a la Secretaría General, la Asociación Civil Transparencia da a conocer la decisión adoptada por su Consejo Directivo al respecto en el mes de Agosto”.

Según el documento, la salida del letrado ocurrió luego de que se presentara una denuncia de hostigamiento sexual y laboral por parte de una empleada de esta institución. Según el hecho denunciado, ocurrido en marzo de 2019, Távara besó a la denunciante en estado de embriaguez.

El informe añade que tanto el abogado como la afectada reconocieron el hecho. Sin embargo aseguran que “la prueba aportada no resulta suficiente para acreditar que se haya configurado la conducta denunciada en todos sus alcances fácticos y jurídicos”. Asimismo se precisa que el exsecretario de esta entidad decidió renunciar al cargo una vez revelado el hecho, sin embargo, precisan que de no haber dejado su puesto hubiera sido separado por la institución.

“(...) El Consejo Directivo declara que la conducta del exsecretario Gerardo Távara, reconocida por ambas partes y una testigo, resulta éticamente reprochable (...) Al ser el cargo de secretario general de la asociación uno que supone un poder delegado por el consejo consultivo y la asamblea, besar a una persona sujeta a subordinación laboral- incluso sin mediar coacción-constituye una distorsión de la ventaja conferida a dicho funcionario. Más aún si ello ocurre bajo los efectos del alcohol. A tal punto ello constituye una falta ética", se lee en una parte de la publicación.

En el texto se menciona, además, que luego del hecho materia de la denuncia, varios testigos dieron cuenta de que Távara comenzó a referirse de “manera poco educada al trabajo de la denunciante y llegó a humillarla frente a los demás trabajadores”.

Ante esta situación Transparencia proporcionó asesoría psicológica a la afectada y precisaron que realizarán una evaluación de sus manuales y procedimientos para evitar que una situación similar se repita.

Al respecto, Gerardo Távara emitió sus descargos a través de su cuenta de Twitter. En la publicación admite la existencia de la denuncia, pero asegura que la investigación de Transparencia concluye en que no cometió hostigamiento sexual.

El exempleado de entidad, además, aseguró que dejó el cargo asumiendo la responsabilidad de sus actos y para que se efectúe una investigación sin interferencias.

Por su parte, la actual secretaria general de Transparencia Diana Chávez, y quien reemplazó en el cargo a Távara, habría desmentido la buena relación que este mantiene con la institución y reveló que le pidió “que no se acerque a la oficina, para garantizar la tranquilidad de la trabajadora”, a través de su cuenta de Twitter.