Una nueva amenaza contra el transporte público en Lima ha encendido las alarmas. El conductor de una unidad de la línea T, atacada a balazos la noche del lunes en Chorrillos, denunció que uno de los extorsionadores responsables del atentado se hizo pasar por pasajero para perpetrar el ataque desde dentro del vehículo.
El violento hecho ocurrió en el cruce de las avenidas Alameda y Santa Anita, donde sujetos armados interceptaron el bus y dispararon al menos nueve veces. A bordo viajaban cerca de 40 personas, quienes afortunadamente resultaron ilesas. Uno de los proyectiles, sin embargo, impactó en el motor del vehículo, obligando a suspender el servicio.
En declaraciones exclusivas al noticiero Buenos Días Perú, el conductor relató que uno de los extorsionadores permaneció dentro del bus incluso tras los disparos. “Yo me bajé para evacuar a los pasajeros, y entre ellos había uno de los extorsionadores. Ese sujeto empezó a grabarme a mí y al bus, y minutos después enviaron un mensaje diciendo: ‘para la próxima mataremos al chofer’”, narró.
Las amenazas no terminaron ahí. Según indicó, desde la noche del atentado la empresa de transporte y sus trabajadores vienen recibiendo constantes mensajes extorsivos atribuidos a la organización criminal conocida como “El Antitren”.
“Nos dicen que tienen el control total de la zona de Chorrillos y que si no se les paga, seguirán los ataques”, agregó el chofer.
“El Antitren” se dedicaría al cobro de cupos a empresas de transporte que operan en esa jurisdicción, utilizando la violencia como método de presión. Las amenazas también se han extendido a familiares de los conductores, generando una ola de miedo e incertidumbre entre quienes laboran en la ruta.
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