La Iglesia Belén de Trujillo no recibirá la Navidad de la mejor manera. Unos inescrupolosos sujetos ingresaron de madrugada a la parroquia y destruyeron el nacimiento a gran escala que se encontraba en la entrada.
Para la indignación y tristeza de los fieles, los delincuentes no solo destruyeron el nacimiento, sino también se robaron los adornos principales de la representación navideña.
Por fortuna de la iglesia trujillana, los responsables del nacimiento no habían colocado aún las figuras de Jesús, María, José, los Reyes Magos o los animales.
Horas más tarde, agentes de la Policía Nacional del Perú llegaron hasta el lugar para realizar las investigaciones correspondientes del caso y así poder dar con la identidad de los ladrones.