La creciente ola de extorsiones ha llevado a los gremios de transportistas de Lima y Callao a tomar nuevas medidas de protesta. Este viernes, decenas de conductores realizaron una movilización hacia el Congreso de la República para exigir mayor seguridad en las calles. Sin embargo, el silencio de las principales autoridades solo ha intensificado el malestar y alimentado la posibilidad de un paro nacional.
Julio Campos, dirigente gremial, confirmó que el viernes 11 de abril se llevó a cabo una asamblea con representantes de todo el sector para definir los siguientes pasos. El gremio evalúa convocar a un paro nacional de transportistas los días 14 y 15 de mayo, como medida de presión frente a la inacción del Estado ante las extorsiones y amenazas que sufren a diario.
Tanto Julio Campos como Miguel Palomino, también dirigente del sector, advirtieron que si no reciben respuestas claras y concretas por parte del Ejecutivo, el gremio no descarta la convocatoria de un paro nacional indefinido que involucre a todos los sectores del transporte: urbano, interprovincial y de carga pesada.
Los transportistas criticaron además el despliegue militar en estaciones principales del transporte público, considerando que esas medidas son solo para “la foto”. En cambio, exigen una mayor presencia policial en zonas de alto riesgo, donde los actos delictivos ocurren con frecuencia.
Mientras tanto, el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, afirmó que el gobierno está trabajando para enfrentar la delincuencia, aunque reconoció que las amenazas han ido en aumento. También señaló que muchas víctimas no denuncian por miedo, por lo que pidió mayor colaboración ciudadana.
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