, gobernador de , señaló que evalúa los perfiles de los 67 funcionarios de confianza observados por la Contraloría debido a que no cumplirían con los requisitos para ocupar sus cargos.

Señaló que “indudablemente hay algunos empleados públicos que tienen que ser removidos”. Sin embargo, dijo que pedirá una “reconsideración” al ente de control para algunos funcionarios que no tienen el grado universitario requerido para el puesto, pero que sí cuentan con maestrías, doctorados y experiencia para ocupar esos cargos.

“Estamos evaluando caso por caso. Hay muchos casos en los que hemos encontrado que no corresponden a la verdad y hay otras incongruencias. Yo lo he conversado con el contralor y me está dando un tiempo para poder hacer los cambios respectivos”, sostuvo.

Asimismo, dijo que si cambiaría a todos los funcionarios observados sería difícil “conseguir esa cantidad considerable de profesionales”, pues refirió que un profesional de nivel va a querer ganar más.

“Un gerente regional gana S/4,500. Creen que si yo hago un concurso público voy a tener profesionales con 3 años de experiencia y maestría en la carrerea profesional que se le exige. Va a ser difícil”, señaló.

La Contraloría había advertido que la contratación de los servidores que no cumplen con el perfil “generan el riesgo que los servicios y operaciones que desarrolle la entidad no se realicen con funcionarios idóneos designados, afectando los principios de meritocracia, transparencia e igualdad de oportunidades”.