Las lluvias intensas en Puno siguen perjudicando a la población, que se encuentra aislada debido a los destrozos que ha ocasionado el agua en las vías que usaban para transportarse diariamente.
Las zonas más perjudicadas son las provincias de Sandia y Carabaya. Los afectados piden ayuda de las autoridades debido a que han perdido desde sus viviendas hasta sus cultivos.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) advirtió que las precipitaciones seguirán hasta el martes 11 en el altiplano y hasta el jueves 20 de marzo en la selva, con un 90 % de probabilidad de cumplimiento.
Además, la oficina del Senamhi en Puno pronosticó la caída de nevadas, granizadas y vientos de hasta 40 kilómetros por hora, lo que podría agravar la situación.
La institución exhorta a la ciudadanía a evitar zonas de alto riesgo durante lluvias intensas, como pendientes inestables, laderas de cerros y áreas expuestas a descargas eléctricas. Ante lluvias intensas, se recomienda evacuar a una vivienda segura o una zona protegida para prevenir tragedias
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