Un grupo de vecinos del centro poblado San Miguel, Pisco, llevaron desayuno a los más de 200 miembros del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios que trabajaron para confinar el incendio registrado en la fábrica de chocolates Machu Picchu.
Según información recogida por RPP Noticias, los residentes de la zona hicieron llegar alimentos y bebidas a los hombres de rojo, quienes continúan sus labores para controlar de manera completa el siniestro.
De acuerdo a los primeros informes, el trabajo de los bomberos continuará y se extenderá aproximadamente hasta la madrugada del martes.
El incendio se habría producido por un cortocircuito en un área recientemente construida en la fábrica, la cual tiene más de 20 años de funcionamiento.