En tan solo un solo un año las cosas en Trujillo han pasado de la tragedia a la algarabía total y esto se debe nada menos que a la visita del a la ciudad. 

Hace casi un año, el Niño Costero arrasó con gran parte de la región norte de país y la ciudad de la eterna primavera no fue la excepción. Los rastros del fenómeno natural persisten pero la gente ha sabido sobreponerse para poder realizar los preparativos de la visita del Papa. 

La señora Irma del distrito de Buenos Aires, uno de los lugares que sufrió más los embates del Niño Costero, se quedará hasta altas horas de la noche para ultimar los detalles de la decoración en Buenos Aires. Un año después, para la señora Irma la visita del Papa significa una bendición para ellos. No es la primea vez que ha visto un Papa, hace 30 años vio a Juan Pablo II por lo cual tiene altas expectativas con la llegada del papa Francisco.

(Perú21)
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La señora Irma no es la única que espera con ansias la visita del Papa. En la explanada de Huanchaco, las hermanas Vicentinas de la Caridad de San Vicente de Paul visitaron el lugar donde el papa Francisco ofrecerá una misa multitudinaria, son un grupo de 30 religiosas que vienen desde Pisco con la ilusión de reunir mañana con el Pontífice. 

“Su sola presencia (del Papa) en el país es un mensaje grande de su gran amor de Dios”, señala Sor María, quien también ya ha visto a un Papa en el país, a Juan Pablo II. “Abran su corazón y su espíritu, el mensaje que trae el papa es de amor y de reconciliación”, declara la religiosa.

En la explanada de Huanchaco hay jóvenes, familias enteras y niños que, a pesar de la lluvia que ha sorprendido a todos esta tarde, no se moverán hasta ver al Sumo Pontífice. El Grupo Scout de la localidad de Trujillo, conformado en su mayoría por adolescentes, también pasarán esta larga noche en la explanada de Huanchaco. “Siempre listos para ayudar a los pereginos”, señala el jefe del grupo.

“Vamos a quedarnos hasta que termine la misa, ayudaremos a los fieles a ubicarse y apoyar en todo”, indica el grupo, que esperan escuchar el mensaje de Francisco: “Queremos que de un mensaje de aliento para los jóvenes para así poder ser mejores cada día”.

Sin duda, ni la lluvia que sorprendió a muchos y el intenso calor amilanará a los fieles que se encuentran a la espera del Papa ya sea en la playa, en las calles o en el aeropuerto. Francisco es esperado por la gente del norte.