El pidió al Ejecutivo que se declare en emergencia sanitaria 11 localidades del distrito de Manseriche, en provincia del Datem del Marañón, afectadas por el derrame de petróleo como consecuencia del sabotaje a una tubería del (ONP).

El ataque ocurrió el pasado 18 de junio y hasta ahora no se pueden efectuar los trabajos de reparación ni medidas para contener la fuga porque los habitantes de las comunidades nativas de Jerusalén y Nuevo Progreso impiden el ingreso de trabajadores de Petroperú, pese al riesgo de que el crudo llegue al río Marañón.

Percy Minaya, jefe de la Dirección Regional de Salud, informó a Perú21 que el trámite se efectuó a través del Ministerio de Salud y el pedido está en manos de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). “Esperamos una rápida respuesta. Se reportaron cuatro personas intoxicadas”, indicó.

Más de 900 familias están afectadas por la contaminación de quebradas, su fuente de agua. Se ubican en Nuevo Progreso, Saramiriza, Gasolina, Puerto Eliza, Betania, Ncacuy, 28 de Julio, Alfonso Ugarte, San Juan de Marañón, Limón y Acapulco.

NO DESCARTA SABOTAJE

El líder indígena José Fachín indicó a Perú21 que no descartó que malos dirigentes nativos se hayan coludido con empresas para atacar el oleoducto y así obtener los contratos para la limpieza y  remediación.

"Petroperú no puede culpar de manera directa a los nativos, por eso pido que se haga una investigación. Si hay nativos responsables serán castigados de acuerdo a nuestra ley", indicó. 

Fachín indicó que hoy habrá una reunión entre representantes de la PCM y líderes nativos en Datem del Marañón. Señaldó que pedirá que se incluya en la agenda la conformación de una comisión que investigue el derrame.