En una valerosa y arriesgada acción dos suboficiales de segunda de la Policía Nacional, identificados como Miguel Ángel y Jhon Williams Quiri Díaz, rescataron a un bañista de morir ahogado en las embravecidas aguas del mar de la playa Hornillos, ubicada en la provincia de Huacho, Lima.
El hecho ocurrió cuando Miguel Quiri Díaz, que labora en la Unidad de Emergencia-División Policial Huacho-Región Policial Lima, se encontraba practicando la pesca artesanal en su día de franco junto a su hermano. En ese momento escucharon gritos de auxilio de personas provenientes de la orilla de la playa.
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Los agentes se percataron que a unos 100 metros mar adentro se encontraba una persona ahogándose. De inmediato, y sin dudarlo, ante la necesidad de salvar la vida de esta persona, Miguel Ángel Quiri se lanzó al mar, pese al fuerte oleaje que se presenta en la zona.
Este efectivo posee conocimientos básicos de técnicas y auxilio de bañistas, pero en ese momento no contaba con los respectivos equipos de salvataje. Sin embargo, al ver que el bañista era arrastrado hacia las peñas de la mencionada playa, ingresó de manera decidida al mar.
Jhon, que labora en la Unidad de Servicios Especiales-USE PNP Huacho, observaba los esfuerzos que realizaba su hermano y al ver que este necesitaba ayuda ingresó también al mar para darle su apoyo.
“Tras denodados esfuerzos, el rescatado, identificado como Giancarlo Muñoz Zapata (19), fue llevado a la orilla del mar poniéndole a buen recaudo”, informó la Policía Nacional.
Muñoz tenía los signos vitales débiles y presentaba hematomas leves en su cuerpo. Los efectivos policiales le practicaron los primeros auxilios de respiración y la reanimación cardiopulmonar (RCP) de alta calidad, además de cogerlo de sus hombros para que no ingiera más agua.
Luego, el rescatado fue examinado por personal médico del Sistema de Atención Móvil de Urgencia (SAMU), quienes tras estabilizarlo, lo evacuaron en una ambulancia al Hospital Regional de Huacho.
El joven ingresó por el servicio de emergencia, donde el médico de turno diagnosticó “síndrome de casi ahogamiento en el mar e insuficiencia aguda”, quedando en observación.
Los valerosos custodios del orden recibieron el reconocimiento de los familiares del rescatado y pobladores de la zona por su arriesgada acción.