Siguen las denuncias. Del 23 de octubre al 5 de noviembre de 2017 se llevaron a cabo los Censos Nacionales 2017 en las zonas rurales del país y, al igual que el realizado en la capital, este no estuvo lejos de la polémica.
Nélida Rojas Condezo, una joven de 25 años de edad denunció en la comisaría de Pichanaki, provincia de Chanchamayo (Junín), haber sido dopada y violada frente a su hijo por un empadronador del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
De acuerdo a la denuncia, Rojas Condezo recibió el 26 de octubre en su vivienda a Alexander Romero Vega, quien se identificó como empadronador del Censo Rural 2017.
En el documento, la joven indicó que Romero Vega ingresó a su domicilio sin su permiso, dentro de la vivienda sacó unas hojas y empezó a rellenar sus datos, luego de esto, el hombre le dijo a Rojas Condezo que era médico y que tenía que revisarla para ver si tenía algún malestar.
La joven madre declaró que tras decirle esto, Alexander Romero Vega le tocó el abdomen y le dijo que tenía que aplicarle una ampolla debido a un supuesto descenso que presentaba.
La víctima narró que luego de la ampolla, ella quedó dopada y, cuando despertó, vio al hombre encima de ella, con los pantalones sobre la rodilla y a su menor hijo llorando.
De acuerdo al diario El Comercio, la oficina provincial del INEI de censos de Chanchamayo confirmó que Romero Vega es empadronador de esta institución y se encuentran investigando el caso.
Asimismo, la titular de la Segunda Fiscalía Provincial Corporativa de Chanchamayo, Betty Lucas Espíritu, ha iniciado las diligencias preliminares en contra de Romero Vega por el presunto delito de violación que se le acusa.