Angélica Cahuana Rosales, quien el 24 de octubre de 2017 intentó matar a su hija de 4 años e intentó suicidarse, busca estar el menos tiempo posible en prisión o incluso salir en libertad y, por ello, aceptó los cargos que le imputa el Ministerio Público. Ella señaló que le dio veneno a la niña, agobiada por problemas con su conviviente.
La mujer, de 36 años, es acusada de tentativa de parricidio en Arequipa. La Fiscalía pide una condena de 6 años de prisión efectiva, pero la imputada –para lograr una pena suspendida–pidió acogerse al beneficio de conclusión anticipada.
Marilú Ramírez Tito, titular de la Segunda Fiscalía Corporativa de Mariano Melgar, precisó que también han solicitado el pago de una reparación civil de 5 mil soles en favor de la menor.
Durante el inicio de juicio en el Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de Arequipa, la defensa legal de Angélica Cahuana manifestó su intención de llegar a un acuerdo con la Fiscalía para que el proceso culmine rápido.
La fiscal, por su parte, indicó que para los delitos de parricidio la ley prohíbe beneficios de reducción de condena.
INVOLUCRADA EN COIMA
Angélica Cahuana también está involucrada en un caso de soborno a un juez penal. Hace un mes, sus familiares y abogados negociaron –por debajo de la mesa– con el magistrado Gino Valdivia.
El juez, de acuerdo con las pesquisas de la Policía, pidió 4 mil soles para rechazar el pedido de ampliación de la prisión preventiva solicitado por la fiscalía para la mujer.
No obstante, producto de una interceptación telefónica al magistrado, los involucrados fueron detenidos al momento de la transacción. Como es público, Gino Valdivia aceptó los cargos y permanece con prisión preventiva.